En ocasiones pretendemos que el otro adivine o sepa algo porque según nosotros "se lo dimos a entender" y esto no siempre sale bien, porque claramente el otro no es adivino.
Y sí, por más que nos conozcan por muchos años, sigue siendo necesario decir lo que necesitamos.
Tenemos parte de responsabilidad en la decepción que nos llevamos, ya que hemos puesto al otro por encima de nosotros, y éste no estaba ni enterado.
Es importante comunicar nuestras necesidades o deseos, aunque entre las respuestas también puede estar el NO.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario