Cerciórate que tu pareja sepa que no es que no te importe, que no le estás interrumpiendo por capricho, que no lo haces para ganar la discusión, que no quieres terminarle ni que le estás aplicando la ley del hielo; simplemente estás pidiendo un tiempo, un descanso, un alto momentáneo, para tomar aire y reflexionar (no en caliente, enojados, a la defensiva, queriendo imponerse), y que sinceramente piensas volver a hablar del asunto en un mejor momento. El Psicólogo y Psicoterapeuta Luis Venegas Chalen, Experto en Terapia de Parejas, recomienda que la pareja practique y se entrene en expresarse lo siguiente: "Este no es el mejor momento para hablar de esto; esto es importante, por eso será mejor que lo hablemos en la mañana, al día siguiente o en cualquier otro momento, cuando ambos estemos menos cansados, menos afectados, menos enojados, más tranquilos, más serenos, más calmados, y podamos pensar claramente, a fin de no tomar decisiones trascendentales en forma impulsiva y luego nos vayamos a lamentar y/o arrepentir".